No es la primera vez, ni tampoco será la última, que os hablemos sobre los neumáticos de invierno. Cuáles son sus características, para qué sirven, cuándo montarlos, cuándo cambiarlos, etc… pero hoy os queremos hablar de cuánto cuestan y si es rentable comprar un juego de 4 neumáticos en España.
En los siguientes enlaces tenéis toda la información necesaria sobre los neumáticos de invierno:
Lo más habitual es que la gran mayoría de conductores españoles hayan comprado un juego de cadenas o fundas para su coche, para esas escapadas a esquiar a la nieve, o simplemente porque viven en localidades con un clima frío con probabilidad de nevadas en invierno.
Es la solución lógica que recomendaríamos en gran parte de los casos. Es más, todos deberíamos contar con un juego de cadenas o fundas por si nos pilla un imprevisto. Ya se vió en las nevadas de Madrid como los conductores españoles no estamos preparados para acontecimientos climatológicos extremos.
Unas cadenas o fundas para el coche nos pueden salir bastante económicas, dependiendo de las medidas de nuestros neumáticos y llantas, y por supuesto del tipo de cadena o funda que queramos. Las hay desde los 20 euros hasta los 200 euros, por poner un ejemplo.
Con los neumáticos de invierno ocurre prácticamente lo mismo. Los hay muy económicos, desde 25-30 euros/neumático, de marcas que no habrás escuchado en la vida, hasta los más “top” de fabricantes punteros que nos pueden salir por más de 1.000 euros si nuestro vehículo monta llantas enormes con medidas de neumático poco habituales.
Cabe recordar que un neumático de invierno no es un neumático sólo para la nieve. No. Ni mucho menos. Es más, un neumático de invierno funciona mucho mejor que un neumático de verano (los que llevamos el 90% de los conductores en España) en asfalto seco a 7ºC, y en mojado. Por debajo de los 7ºC los neumáticos de verano pierden eficacia, pierden agarre, y ya pueden ser los mejores neumáticos del mercado que su seguridad se verá mermada.
Ahora bien, en España tenemos un clima muy distinto entre unas comunidades autónomas y otras. No es lo mismo vivir en Navarra que en Extremadura. A un Andaluz, por ejemplo, difícilmente se le puede recomendar un neumático de invierno excepto en casos puntuales. Allí las temperaturas raramente bajan de los 7 ºC en invierno, por lo que no saldría rentable. En cambio, a un habitante del norte, posiblemente le suponga una excelente alternativa. Se montan en noviembre-diciembre y se vuelven a cambiar en marzo-abril por los neumáticos de verano. Esto hace que no te tengas que preocupar de llevar unas cadenas contigo, de montarlas y desmontarlas cada vez que te encuentres con nieve, y mejorarás la seguridad en los trayectos con temperaturas muy frías.
Comprar 4 neumáticos de invierno supone un desembolso considerable, pero ten en cuenta que los vas a usar de 3 a 5 meses al año, por lo que podrás usarlos durante varios años. Lo mismo ocurre con los de verano, al montarlos menos meses al año su durabilidad será mayor y no habrá que cambiarlos tan a menudo.
Muchos fabricantes de neumáticos y talleres especializados cuentan con cámaras especiales donde te guardarán los neumáticos que no vayas a usar en condiciones de conservación óptimas, con una temperatura y humedad adecuadas para que no pierdan propiedades.
