Primera prueba de conducción del nuevo Skoda Superb Combi, un modelo que llegará al mercado en 2024 y que ahora tenemos la ocasión de conducir camuflado tanto en su exterior, como en su interior para verlo en primicia.
El Skoda Superb está a la venta en España desde 33.600 euros. Eso sí, la cuarta generación no llegará a los concesionarios de la marca en nuestro país hasta mediados del próximo año, en 2024.
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Historia del Skoda Superb
El Skoda Superb llegó en 2001 como una berlina de gran formato que brillaba por un generoso maletero y sobre todo por una segunda fila digna de una limusina. En 2008 se introdujo la segunda generación que aportaba un curioso portón trasero que se podía abrir tanto como un sedán, como un hatchback llevándose la luneta posterior. Una práctica, a la vez que compleja solución que Skoda bautizó como Twindoor.
Con la segunda generación del Superb se estrenó también la carrocería familiar o Combi en 2009 con un maletero todavía más colosal que el de la berlina. La tercera generación del Superb, la que conocemos hasta hoy fue lanzada al mercado en 2015. Es de largo la que ofrece un diseño más bonito, inspirado en el prototipo Vision C de 2014.
Estas tres generaciones del Superb juntas suman más de 1,5 millones de unidades vendidas. Toda una demostración de la fuerza que tiene este modelo dentro de la marca checa.
Diseño del nuevo Skoda Superb
Aunque a simple vista se parezca bastante a la tercera generación, el nuevo Superb que llega en 2024 introduce un gran número de novedades. Bajo este vinilo hay un importante rediseño del frontal y del capó del motor. La calandra deja de ser cromada para adoptar un acabado satinado más discreto.
Este nuevo Superb Combi es 40 mm más largo que la generación precedente con una longitud de 4,9 metros. Curiosamente es 15 mm más estrecho con 1,84 metros y 5 mm más alto con 1,48 metros. La distancia entre ejes se mantiene inalterada con 2,84 metros.
La marca anunció que habrá cuatro acabados: Selection, Essence, Laurin & Klement y Sportline. Para el interior serán varias las líneas disponibles, 13 packs de opcionales, 11 llantas y 8 colores. El coeficiente aerodinámico ahora es de 0.24 en lugar de 0.26, una mejora del 12,5% que reduce las emisiones de CO2 en un 9%. Al igual que en el frontal en la trasera el vinilo apenas deja apreciar los cambios. Un detalle novedoso que sí pudimos ver en vivo y en directo fue la nueva bandeja cubre maletero automática. Ahora se abre de forma eléctrica al abrir el portón y se cierra también cuando le das al botón para cerrar el maletero.
Prueba dinámica del Skoda Superb 2024
Esta es una breve toma de contacto al volante del Skoda Superb Combi 2024 muy cerca del hotel al que asistimos casi al lado de la frontera de Francia y Suiza. La unidad que pude conducir fue un 1.5 TSI Evo2 Micro Híbrido de 150 CV, un motor nuevo en la gama. Destaca por el motor eléctrico que equipa en lugar del alternador, tanto para arrancar el motor térmico, como para aportar par adicional en aceleración.
Va asociado a una caja de cambios DSG de 7 velocidades, una doble embrague automática tradicional ya dentro de los modelos del Grupo Volkswagen. El motor es silencioso y ofrece una respuesta que parece más vigorosa que el 1.5 TSI Evo sin sistema micro híbrido de otros modelos que he probado anteriormente.
Ya no cuenta con la palanca del cambio tradicional en el túnel central. Ahora el cambio se gestiona con un mando giratorio que hay integrado en la columna de dirección, a la derecha. No se activa hacia arriba ni hacia abajo, se mueve hacia delante y hacia atrás, al estilo del mando que encontramos en Skoda Enyaq.
Eso sí, la gama de motores es más amplia. Hay un 2.0 TSI de 204 CV y otro de 265 CV que antes eran 280 CV en la tercera generación. En diésel hay dos 2.0 TDI con 150 y 193 CV. Tanto el 2.0 TSI de 265 CV y el 2.0 TDI de 193 CV son de serie 4x4. Y todos los motores trabajan en conjunción con un cambio DSG de 7 relaciones de serie, ya no se podrán configurar con cambio manual.
También habrá una variante híbrida enchufable que con un motor térmico 1.5 TSI Evo2 de 150 CV y un motor eléctrico que juntos declaran 204 CV. Por fin el híbrido enchufable del Grupo Volkswagen pierde el 1.4 TSI antiguo en pro de un 1.5 de última generación.
La batería del sistema híbrido enchufable con 25,2 kWh declara el doble de capacidad de la que ofrecía antes. Con ello la marca checa anuncia una autonomía teórica de más de 100 kilómetros en modo eléctrico 100%, todo un logro para un vehículo de este tamaño y peso.
A nivel de chasis cuenta con la suspensión DCC Pro con 15 puntos distintos de regulación, además del Normal, Comfort y Sport. Se nota más duro que antes, dado que esta unidad dispone del acabado Sportline, filtra bien en badenes, pero a la hora de los agujeros del asfalto se muestra más seco en el rebote, en extensión. Merece la pena destacar que Skoda ha diseñado dos nuevos subchasis, el delantero en aluminio y el trasero en acero más robusto.
Es una lástima que no pudiéramos mostrar los nuevos mandos del sistema de climatización dado que son mandos físicos con una pantalla integrada que permiten regular todo de una forma más fácil que una pantalla táctil.
Otro detalle que me sorprendió fue el tacto del tapizado. El Superb es el buque insignia de Skoda y aunque se trate de una versión básica, los acabados siempre son intachables. En esta unidad curiosamente contaba con un tapizado que no está a la altura con un tacto muy áspero que para nada esperas en un Superb.
En resumidas cuentas
La experiencia fue breve pero intensa. Son muchos los cambios que introduce la cuarta generación del nuevo Skoda Superb. Lo más importante ha sido ver lo cómodo que es su chasis, así como descubrir que se mantienen los motores gasolina y diésel en la gama. Ya hay ganas de verlo sin camuflaje y ya de paso probarlo como Dios manda.
Tranquilos cuando le quiten el camuflaje será tan feo o nas como aparenta y como todos los skoda