Llega la tercera generación
Han pasado 14 años desde el lanzamiento del Skoda Superb tal y como lo conocemos hoy en día, un modelo del que la marca checa ha vendido más de 700.000 unidades hasta el momento. No obstante, la historia del Superb se remonta a 1934, cuando empezó a fabricarse como modelo de lujo en los años de preguerra mundial.
Hoy la marca checa Skoda acaba de presentarnos la nueva generación de su buque insignia, el Superb. Llega con importantes cambios en todos los apartados, desde el diseño, la habitabilidad y novedades mecánicas, incluyendo plataforma y chasis, que elevan notablemente la calidad general de esta berlina media.
Como os acabo de comentar hay cambios en la plataforma. Se beneficia enormemente de la tecnología MQB del Grupo Volkswagen para ofrecernos ahora un interior aún más ámplio gracias a la mayor batalla que se le ha concedido. Para que os hagáis una idea la distancia entre ejes es 8 centímetros más larga que la del Passat, todo un referente en este segmento.
De esta forma se ha ganado un generoso espacio para las piernas en la fila posterior y, al ser ligeramente más alto, también distancia al techo para la cabeza. Todo ello sin perjudicar lo más mínimo a la capacidad del maletero, todo lo contrario, porque ésta crece hasta los 625 litros, lo que supone un incremento de 30 litros adicionales respecto al modelo anterior.
El diseño del salpicadero sigue un estilo continuista -lógico, teniendo en cuenta el tipo de cliente interesado en un coche como éste-, con una nueva pantalla de navegación de gran tamaño que preside una consola central especialmente ancha.
He tenido el privilegio de subirme apenas unos segundos al puesto del conductor y la verdad es que la calidad percibida es muy alta. A falta de trastear un poco más a fondo la primera impresión ha sido excelente, con unos acabados acordes y, como comento, con un diseño algo continuista pero a la vez en conjunción con los valores de esta berlina.
Es el primer modelo de la marca en ofrecer el sistema Dynamic Chasis Control (DDC) que incluye el Selector de Modos de Conducción. A esto hay que añadirle el aire acondicionado trizona, asientos calefactados delante y detrás, parabrisas de climatización inalámbrica y eyectores calefactables. Sólo una pequeña muestra de todo lo que puede equipar el nuevo Superb.
Como no, las soluciones “Simply Clever” no dejan de sorprendernos, como el paraguas escondido en cada una de las puertas delanteras, el portón eléctrico trasero con apertura de pie, el sujeta-tarjetas en el parabrisas, el rascador de hielo en la tapa del repostaje o lo que parece una tontería pero es realmente útil: los huecos para botellas tienen en el fondo unas estrías que se ajustan a los culos de éstas, así nos permite abrir el tapón con una sola mano sin tener que soltar el volante.
La conectividad también está a la orden del día. Hay cuatro nuevos sistemas de infoentretenimiento, más rápidos, con pantallas táctiles de alta resoluciones y con funciones e interfaces mejoradas. También, como opción, se ofrece el acceso a internet de alta velocidad integrado en el sistema de alta gama Columbus, así como conectividad con smartphones y una selección de apps que pueden controlarse desde la misma pantalla o desde los asientos traseros a distancia.
En cuanto al diseño exterior no se ha querido tomar demasiados riesgos con esta tercera generación pero los cambios que se ofrecen, a mi parecer y visto en vivo, le quedan de fábula otorgándole una impresionante estampa.
La amplia parrilla frontal, los paragolpes de nueva confección y las ópticas de nuevo diseño enfatizan la sensación de amplitud del modelo. El capó está más abombado y dos marcadas nervaduras refuerzan una imagen potente.
Visto de costado se ha potenciado el efecto visual de dinamismo con una línea de cintura alta que recorre todo el costado. La caída del techo en la zona posterior se ha alargado adoptando ahora una forma de estilo más cupé.
En la zaga destacan los nuevos pilotos LED con la firma lumínica en forma de “C” que disimula en gran medida una forma muy parecida a la de tantos modelos de la marca de los cuatro aros (Audi).
Las motorizaciones ofrecen hasta un 30% de ahorro de combustible y emisiones respecto a los actuales gracias también a una reducción del peso de 75 kg y mejoras en la aerodinámica exterior. Estarán disponibles cinco motores TSI de gasolina con potencias desde los 125 a los 280 CV y otros tres diésel TDI de 120 a 190 CV. Todos ellos cumplen con la normativa de gases Euro 6 e incorporan de serie el sistema Stop-Start y el de recuperación de la energía de la frenada.
En gasolina estarán disponibles dos variantes del 1.4 TSI de 125 y 150 CV. El primero ofrece 200 Nm de par máximo y un consumo medio de 5,4 l/100 km. La segunda variante logra reducir el consumo hasta unos excelentes 4,8 l/100 km gracias a la tecnología ACT de desconexión de cilindros.
Justo en medio de la oferta de gasolina se encuentra el 1.8 TSI de 180 CV y 250 Nm de par. Esta versión homologa 5,8 l/100 km y puede acelerar de 0 a 100 km/h en 8 segundos para alcanzar una punta de 232 km/h.
Los motores más potentes de gasolina se desarrollan bajo el mismo bloque 2.0 TSI y ofrecen 220 y 280 CV. El primero tiene un par motor de 350 Nm y consume 6,1 l/100 km, y acelera de 0 a 100 en 7 segundos. El más potente de la gama sustituye al anterior 3.6 FSI de 260 CV añadiendo 20 CV adicionales y reduciendo el consumo y las emisiones en torno a un 24% (aún sin especificar). La marca señala el 0-100 en 5,8 segundos y una velocidad máxima de 250 km/h.
El motor de acceso a la gama diésel es el 1.6 TDI de 120 CV. Esta mecánica entrega 250 Nm de par a partir de las 1.500 rpm y tiene un consumo mixto de sólo 3,9 l/100 km por unas emisiones de 103 g/km de CO2. Para cerrar en diésel el motor 2.0 TDI estará a la venta con potencias de 150 y 190 CV. La primera variante aumenta el par hasta los 340 Nm y homologa un consumo de 4 l/100 km, mientras que la segunda aumenta el par a 400 Nm consigue ofrecer el mismo consumo medio que la versión de 150 CV.
A excepción del motor gasolina de entrada a la gama todos podrán montar transmisión automática de doble embrague, y cuatro de ellos (1.4 TSI de 150 y 280 CV y 2.0 TDI de 150 y 190 CV) estarán disponibles con tracción a las cuatro ruedas con embrague Haldex 5.
El chasis totalmente renovado cuenta con suspensión delantera McPherson y eje trasero multibrazo. Ambas se han puesto a punto de tal forma que el nuevo Superb, según la marca, mejora tanto en confort de marcha como en estabilidad.
La larga lista de sistemas de seguridad la componen, entre otros, el Front Assit con función City Emergency Brake, control electrónico de la presión de los neumáticos, siete airbags de serie, Control Adaptativo de Crucero (ACC), Crew Protect que prepara a conductor y pasajero ante una colisión, Lane Assist, Traffic Jam Assist, avisador del ángulo muerto en el retrovisor, Rear Traffic Assist, detector de fatiga y muchos más.
Hola, yo tengo el 130 tdi de 2004 y de motor ningún problema pero todo lo demás sí fuelles de las rótulas, alternador, dos cerraduras estropeadas, el marco de los tiradores es de papel albal, el plástico de alrededor hecho una pena. Pero el coche va fino fino, ágil y consume poco pero lo de la fiabilidad como que no.