Bentley EXP 10 Speed 6

El automóvil de gran lujo no entiende de crisis. Y si no que se lo pregunten a los responsables de marcas como Rolls-Royce o Bentley, que no paran de batir récords de ventas y afrontan un futuro tan esperanzador como lucrativo para sus respectivos propietarios, los grupos BMW y Volkswagen.

La casa de Crewe, en concreto, ha vivido un último semestre de locura. El pasado septiembre, presentó en el Salón de París el nuevo Mulsanne Speed, para sorprendernos dos meses después en el Salón de Los Angeles con el concept car Grand Convertible, que desvela cómo podría ser un futuro Mulsanne descapotable. Ya en enero de este año, hizo oficial el nombre definitivo para su anticipado SUV, al que ha decidido bautizar como Bentayga y que con este su carrocería todocamino marcará el inicio una nueva etapa en el mercado de los coches de lujo –y cuya estela seguirá Rolls-Royce, que también quiere exhibir un SUV en su catálogo de papel couché-. Por último, hace apenas tres semanas, la marca de la “B alada” anunció un oportuno restyling para el ya veterano Continental GT.

Ahora, llegado el Salón de Ginebra, Bentley ha querido dar la campanada con la presentación del EXP 10 Speed 6, un concept car tan placentero para la vista como doloroso para el habla. Pero lo mejor de este cupé biplaza no es lo que muestra ahora –y que os describiré en un instante-, sino lo que promete para mañana; pues la marca no esconde que su intención es llevarlo a la serie, situándolo en su línea de productos por debajo del Continental GT.

Aunque no hemos podido medir las dimensiones exactas del EXP 10 Speed 6, sus proporciones parecen coincidir bastante con las del . Y tiene bastante lógica que Bentley pretenda enfrentarlo a aquél, visto el éxito cosechado por el modelo de Coventry. De confirmarse esta circunstancia, estaríamos hablando además del modelo más pequeño de la gama.

En cuanto a diseño exterior, el nuevo concept car de adopta los principales rasgos del lenguaje visual de su marca. Aun así, -y aquí voy a ser muy subjetivo-, la primera impresión es la de encontrarnos con un cupé diseñado de manera conjunta entre Bentley y Jaguar, adoptando el gusto por la contundencia y el músculo de la primera con la suavidad de líneas de la segunda.

El frontal, más típico de Bentley, cuenta con la característica parrilla rectangular flanqueada por dos focos a cada lado, aunque el conjunto queda situado en una posición más baja para acentuar la sensación visual de agresividad. Como bien apunta mi compañero Gerard Farré, gran experto en estas lides, el morro de este coche recuerda al del concept Hunaudieres que Bentley presentó en 1999 y que podéis ver en la galería de fotos de este artículo. La zaga, por su parte, presenta un voladizo corto y escasa superficie vertical, haciendo coincidir pilotos y escapes, todos ellos muy planos y de forma ovalada.

Lujo, exquisitez y refinamiento son tres palabras que solemos emplear para definir el habitáculo de un Bentley. Y éste, repleto de inserciones y recubrimientos en piel, metal y madera, no iba a ser menos. Su diseño combina tradición y originalidad, dividiendo los asientos con una exageradísima consola central que cae como un tobogán desde el salpicadero. Allí nos encontramos con una pantalla táctil de superficie curva que parece lanzarse hacia el parabrisas a modo de trampolín. Bajo aquella, emerge una corta palanca de cambios realizada en madera de cerezo y aluminio, con el logo de la marca realizado en cobre.

Poco se sabe de momento acerca de las cualidades dinámicas del coche. La marca sí indica que bajo el capó del EXP 10 Speed 6 se esconde un sistema de propulsión híbrido capaz de entregar un elevado nivel de potencia. Esperamos ofreceros más detalles próximamente; mientras tanto, os invitamos a seguir disfrutando de toda la información que os traemos desde el Salón de Ginebra.